Así estoy ahora, malviviendo con esta Leonor que no me gusta y llamando desesperadamente a la otra. A veces creo divisarla lejos, muy lejos y cuando me encamino hacia ella, se esfuma y la vuelvo a perder. Es agotador y paso mis días arrastrándome o recreándome en recuerdos de un pasado no tan lejano, martirizando con los errores que me ha traído aquí, con lo que pudo haber sido y no fue. Hay días que me deleito intentándome una nueva vida partiendo de los veinte años, como si hubiese tomado otro tren. Es una válvula de escape para perder de vista esta realidad no deseada. Lo peor es que soy consciente de que esta huida hacia atrás es peligrosa e improductiva pero necesito dejar de sentir esta realidad angustiosa.
Cuando estoy angustiada me gustaría diluirme, esfumarme, ser etérea y formar parte del aire. Entonces me acuerdo de esa canción de Mecano, Aire.
6 comentarios:
los errores y aciertos del pasado son los que nos hacen como somos.
Si no hubieras tomado ese camino, sino otro, habrían sido otras las dificultades que te hubieran acompañado.
Es muy sencillo visualizar otra vida feliz, pero lo que hay que hacer es trabajar para que la realidad se parezca en todo lo posible a ese sueño.
1beso fuerte y cuidate
sin tiempo, paso rapido
por cierto
¡¡nominada!!
No quiero publicidad, a ver si te enteras. NO SPAM
NO
NO
NO
Publicar un comentario